Para el director de correo, un militante de un partido no debe actuar en manifestaciones públicas de reclamos, protestas, es mas pide que ordenen en sentido contrario. Parece que el señor no sabe que es un derecho de todo ciudadano expresarse públicamente, y si convoca a una manifestación están en todo su derecho. Que en la manifestación se produzcan hechos que pueden salirse de control, no puede responsabilizarse a quien haya convocado. De ninguna manera, nuestras libertades de expresión, como el deber de mantener el orden público tienen otros mecanismos de control. Para eso está la fuerza pública que está obligada garantizar el orden o establecer responsabilidades personales.
Pero esa posición de que no se reunan, parece de una posición primaria en el sentido de total desprecio por las libertades del colectivo nacional.
Quizás por tener a referentes tan denigrantes, nuestra cultura padece una de sus mas grandes crisis históricas.
Qué haría el ilustre amauta si pudiese ver en que ha devenido su prole, en una posición totalmente intolerante, el hombre autodidacta parece que aprendió mejor que el periodista educado formalmente.
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