
Con la salida de Kuori de la contienda, se safó de su perseguidor en las preferencias, entonces cuando se esperaba lecciones de decencia, de objetividad, aparece la señorita empantanada en discusiones sin sentido.
Ante la irrupción de una nueva figura en la arena política caliente, una figura sin duda de izquierda, como Susana Villarán, comienza una nueva batalla, donde las reglas son las que fueron los primeros en ser derribados.
Así que una le dijo a la otra que "tenía miopía moral", en referencia a haber recibido millones de un empresario procesado por posibles vínculos con el narcotráfico. Qué además la alejaba de la clase media que decía representar Lourdes, pues 58000 soles mensuales aquí aún es una fortuna, teniendo en cuenta que fácil puede ser el sueldo de un ciento de trabajadores que ganen el sueldo mínimo.
Cómo quiera que Lourdes no encontró argumentos para rebatir los programas del rival, porque podría haber quedado bien parada mostrando su programa de gobierno, cifras claras, realistas, compromisos sólidos de cumplimiento. Pero no, allí se limaron las uñas y juntaron saliva para atacar ideologías, creo el peor error de Lourdes.
Vamos que si ella representa la derecha tan simpatizante del liberalismo, a sabiendas de las crisis que puede generar, atacar a su rival por ser de izquierda, no es sino un harakiri político. Que pone a Lourdes en un papel Macartista retrógrado, que hasta en el Perú existe libertad irrestricta de pensamiento.
Si la única arma es atacar ideologías, bien se puede colegir que ni ella está segura del impacto positivo de la exposición detallada de sus propuestas. Vaya, porque decir voten por mi, que soy de derecha, también lo es fujimori, y ya vimos a donde nos condujo un gobierno tan fiel seguidor del liberalismo, con el agravante de que sus funcionarios cometieron tan punibles delitos.
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