Rosa María P, en su afán de llevar agua para el molino naranja, dió uno de sus peores espectáculos en la televisión. Para quién expone la defensa a ultranza del sistema neoliberal como uno de los pilares de la democracia, le tocó su hora dificil, con Carlos Tapia no pudo, porque si uno no responde las preguntas preparadas con zancadillas, no es mas educado quien no le deja hablar. Al final los dos dieron muestras de falta de calma, pero el kimono afloró mas claro que nunca. Si con todas las imperfecciones del programa de los nacionalistas no ganaron en primera vuelta, no le queda otra que hacer concesiones con las otras fuerzas políticas. Así que agarrarse del plan inicial, ya mas suena a golpe bajo. Si el pasado ideológico condena a los nacionalistas, el pasado corrupto, criminal, mafioso sepulta a sus adversarios. Las ideas pueden cambiar, solo los imbéciles no cambian. Ni dejar intacta la constitución, ni cambiándola por completo es la solución, siempre la obra del hombre será perfectible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario